El estrés puede tener efectos negativos significativos en la piel. Cuando una persona está sometida a altos niveles de estrés crónico, el cuerpo produce una mayor cantidad de hormonas del estrés, como el cortisol.
¡Hola mimatelover! Hoy te voy a hablar de un tema muy importante que está afectando y preocupando cada vez más a la población pero, eso sí, con un tono diferente, más distendido:
¡El estrés y su impacto en nuestra piel! No es algo nuevo y tanto tú como yo sabemos que el estrés puede afectarnos a todos los niveles: físico, emocional y mental. Pero ¿te has parado a pensar que también puede afectar directamente nuestra piel? Sí, así es. Nuestro cuerpo, cuando se encuentra con niveles altos de estrés libera hormonas, como el cortisol, que pueden desencadenar una serie de cambios en nuestro día a día.
¡Granitos!
Es frecuente que aparezcan brotes de acné y granos molestos en el momento menos oportuno. El cortisol en exceso estimula las glándulas sebáceas, lo que puede resultar en un aumento de la producción de sebo y la obstrucción de los poros.
¡Enrojecimiento y aumento de la sensibilidad!
Cuando nos sentimos estresadas podemos notar cómo la piel se nos enrojece, notamos calor y un aumento de la reactividad o sensibilidad en el rostro. Te ha pasado alguna vez, ¿no es cierto? Pues necesitas saber que, eso es debido a que el estrés está afectando negativamente a la barrera protectora de tu piel. Esto puede provocar una inflamación teniendo como resultado que la piel se vuelva más sensible y propensa a reacciones adversas.
¡Pérdida de brillo y luminosidad!
El estrés crónico puede afectar la renovación celular de la piel. La luminosidad y viveza de la piel disminuyen. Se ve afectada la circulación sanguínea, lo que disminuirá la cantidad de nutrientes y oxígeno que llegan a la piel, privándola de su resplandor y belleza natural.
¡Arrugas y líneas finas de expresión !
Otro de los factores que se ve afectado es el proceso de envejecimiento prematuro de la piel. De nuevo, el cortisol en exceso puede debilitar la producción de colágeno, protagonista indiscutible cuya función mantiene la piel firme y elástica.
Finalmente, desde Cosmética Mímate no queremos estresarte aún más hablando del estrés, ¡pero queremos ayudarte y es muy necesario ser conscientes de cómo puede afectar a tu piel! Éstas son algunas de nuestras recomendaciones para crear una estrategia para ayudar a mantener tu piel en buen estado incluso en momentos estresantes:
- ¡Relájate y respira! Enciende una vela aromática y establece tu rutina diaria de cuidado de la piel como una experiencia única y ese tiempo, solo para ti.
- Duerme lo suficiente. El descanso adecuado es vital para la salud de la piel. Intenta establecer una rutina de sueño regular y asegúrate de disfrutar las horas de sueño necesarias.
Recuerda, tu piel refleja cómo te sientes por dentro. Cuida tu bienestar emocional, es la clave. Poco a poco verás como tu piel se ilumina y se vuelve más lozana, radiante y saludable. ¡Empieza a relajarte, sonríe y mímate!